

Es más que una estadística, es el reconocimiento a un proceso, a jugadoras que representan, que compiten y que generan identidad.
Después de una Copa América histórica, la Selección Argentina Femenina subió dos puestos y se ubica ahora en el puesto 30 del mundo, según la última actualización del ranking FIFA.
También es un mensaje: el fútbol femenino argentino está creciendo y el mundo lo está viendo. Que este avance impulse lo que falta: más partidos, más visibilidad, más inversión.